Se resiste afuera del gobierno y se resiste en él, fortaleciendo el imaginario colectivo que coloca el poder en pequeños grupos, sin los cuales no habría destino. Las únicas salidas que parecen posibles son esa resistencia o la resignación a una fatalidad que se presume inalterable. Esa es la trampa en la que caen muchos teóricos sociales bienintencionados, la dirigencia de los partidos populares y los comunicadores que no responden a los intereses corporativos.
Este libro tiene el ambicioso objetivo de habilitar un camino paralelo: busca la construcción de una alternativa superadora, que permita optar. Pero no optar desde una práctica defensiva ni resignada sino desde una práctica conducente a construir un tejido social donde el objetivo superior sea atender las necesidades comunitarias y aspirar a transitar por el mundo con felicidad.
Ocupémonos plantea la necesidad de abandonar las expectativas en el Estado de Bienestar y asumir que es la hora de la participación masiva. La hora de un cambio que llevará tiempo, pero que con convicción y perseverancia puede empezar a implementarse desde ahora en muchos ámbitos. La hora del Estado Transformador.