Nací en 1998, en la ciudad de Bogotá (Colombia), un niño con los ojos en el cielo y siempre soñando. Siendo muy joven, comencé escribiendo poemas y canciones; unas fueron publicadas en algunos periódicos escolares y otras saltaron al olvido de una mente retorcida por la nada en sí misma. A la edad de 13 años terminé mi primera obra, sabiendo que no sería fácil entrar a la industria literaria, no me rendí; sigo aprendiendo y conociendo sobre el mundo. A pesar de llevar tantos años escribiendo, no pierdo la fe. Sé que pensar con los ojos engaña y que es mejor pensar con los ojos del alma que no trama para que así la vida misma se encargue de los procesos y yo de escribirlos.